✨ Budismo Tibetano: Meditación Samatha ¿Qué es? ¿Cómo meditar?



Desde hace algunos meses estoy asistiendo al Centro de Meditación Sidharta en la ciudad de Valparaíso (Chile), un lugar en donde se practica el Budismo Tibetano Vajrayana o Tantrayana (variante esotérica) desde hace más de 30 años y he estado aprendiendo mucho sobre su filosofía y las diferentes técnicas que poseen para pacificar la mente e iluminarse. 
Han sido meses en los cuales he podido saborear el elixir de la autorealización en muchas ocasiones y es por ello que escribo este artículo, en honor a la bella Sangha que conformo actualmente y de la cual aprendo el Dharma.
Pretendo acercar a ustedes esta clase de conocimientos por medio de una serie de artículos que iré escribiendo en torno al Budismo Tibetano aquí en mi blogspot Esmeralda-esoterica


¿Qué es la Meditación?


Antes de conocer al budismo como tal, pensaba que meditar era algo así como poner la mente en blanco o relajarse para entrar en trance, abrir el tercer ojo y cosas similares. Pero realmente el gran propósito de la meditación es enseñarnos a llevar nuestra atención ante determinado objeto de nuestro cuerpo (como la respiración) para empoderarnos y conducir nuestro flujo de pensamientos al objeto en cuestión, observando el estado natural de la mente no dual y evitando así que nuestras conceptualizaciones mentales nos dominen y creen una realidad de causas que generen dolor (Karma).
Realmente la meditación tibetana o Samatha es algo que si bien se ve bastante simple y todos lo podemos realizar, requiere un determinado entrenamiento. Lo anterior se debe a que nadie nunca nos enseñó a dirigir nuestra mente y a tomar "conciencia" de nuestra propia conciencia. 
La mente es más que un órgano, es una antena que nos permite conceptualizar la realidad y darle forma a partir de nuestro lenguaje y nuestros sentidos. Todo el tiempo estamos interpretando y conceptualizando la realidad, pero nunca vemos lo que realmente hay allí o dentro de nosotros mismos, debido a que todo lo que percibimos es una ínfima parte de la realidad tangible que nos rodea, la cual en su última instancia se cimienta en un vacío total de luz no dual.
Los pensamientos, traumas y conceptualizaciones son aquellas ideas o fetiches que nos atrapan y encadenan al Samsara, la gran rueda de Karma.
Encausar y conducir estas ideas, viéndolas, abrazándolas y no intentando controlarlas, ni luchar contra ellas es lo más complicado de la meditación, debido a que todo el tiempo es la mente la que controla nuestra atención.

¿Cómo meditar? (Meditación Samatha)

1) Sentarse en posición de "flor de loto" o en seiza. Si tienes problemas a la espalda o en tus piernas puedes sentarte en una silla y hacer la meditación allí. Lo importante es que la columna esté derecha y estén cómodos.
ADVERTENCIA: No hacer la meditación acostado, ni en la cama. La cama es el lugar para dormir, nosotros buscamos despertar.


2) Haz el "mudra de vacío" con tus manos, poniendo la mano izquierda bajo la derecha tal cual aparece en la imagen de referencia. Luego cierra tus ojos y guarda silencio.

Mudra de Vacío

3) Enfócate en guardar calma, relajarte siendo consciente de cada parte de tu cuerpo. Visualiza con los ojos cerrados tu coronilla, tu frente, mejillas, nuca, hombros, espalda, estómago, brazos y piernas y a medida que los repasas con la visualización ve relajándolos más y más. Hacemos lo anterior alrededor de 10 minutos o lo que nos tarde en relajarnos completamente.


4) En cuanto nos damos cuenta que el cuerpo se siente muy calmado comenzarán a aparecer los pensamientos y ellos nos llevarán a donde quiera que nuestras tendencias mentales estén sujetas. Para dar conducción a la mente en ese momento será necesario que en medio de la meditación pongamos toda nuestra atención hacia la forma en como respiramos. Intentaremos regular el ciclo de nuestra respiración y trataremos de hacer inspiraciones y espiraciones profundas y conscientes todo el tiempo. Tal actividad detendrá todo intento mental de controlarnos, pues el posicionar la atención sobre un objeto constante y centrado en el presente de nuestro cuerpo hará que nuestra consciencia vea al presente y a nuestro interior de una forma diferente, dejando que la mente se tranquilice, por lo cual desarrollaremos constantemente con las prácticas una percepción más profunda de las cosas. Haz esto de 10 minutos en adelante, lo que creas que sea suficiente.

5) En medio de nuestra meditación es muy probable que incluso posicionando nuestra atención en la respiración vengan a nuestra atención diversos pensamientos que nos distraigan todo el tiempo por los grados de importancia que representen para ti, pero en tal momento no te sientas mal, sucede a menudo y en menor medida cuando te comienzas a conocer mejor. Para ello solo vuelve a posicionar tu atención en la respiración, las veces que sea necesario hasta que te aprendas a reconocer y a empoderarte.


6) Vuelve a tomar consciencia de tu cuerpo y paulatinamente ve abriendo los ojos y recomiendo que elóngues un poco tus músculos. 


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