En la historia de la humanidad encontramos un sin fin de maestros que en su momento dieron grandes palabras de aliento y sabiduría al mundo. De aquellos sabios podemos destacar por mucho al buda histórico, Sidharta Gautama (Sakiamuni) quien fue el primer humano iluminado en dar vuelta a la Rueda del Dharma (Verdad), enseñando así la vía definitiva hacia la cesación del sufrimiento y la iluminación.
Las enseñanzas de Buda Sakiamuni fueron transmitidas a una serie de discípulos que dejaron escritos los discursos filosóficos y metafísicos del Buda en textos llamados Canon Pali o Tripitak. Sobre la base de estos discursos se levanta toda escuela de budismo existente.
Es en el Canon Pali donde se hallan contenidas "Las Cuatro Nobles Verdades", preceptos que rigen a todo ser atrapado en el Samsara, los cuales son: 1 - La verdad del sufrimiento, 2 - La verdad de la originación del sufrimiento, 3 - La verdad del sendero de cesación del sufrimiento y 4 - La verdad de la cesación.
A continuación definiremos cada una de las 4 verdades citando un extracto del libro "¿Qué es el Budismo? " (2017) escrito por el venerable Dr. Wangchuk Dorjee Negi.
1) La verdad del sufrimiento
En las escrituras han sido mencionados tres tipos de sufrimiento: sufrimiento del sufrimiento, sufrimiento del cambio y sufrimiento que todo lo impregna.
De entre las Cuatro Nobles Verdades, el primer paso es la de identificar la enfermedad del verdadero sufrimiento. Buda hizo que sus discípulos comprendieran que la vida es una lucha. Nacimiento, vejez, enfermedad y muerte, son todos sufrimiento. Por otra parte, nos involucramos con cosas desagradables y somos separados de aquellas agradables. Nos encontramos con muchas distracciones tales como la adicción al alcohol y las drogas, problemas de falta de vivienda, incapacidad para sostener una relación y falta de intimidad en las relaciones personales, etc. Por lo tanto, si miramos profundamente dentro de nosotros mismos, experimentamos la sensación de frustración e insuficiencia en nuestras vidas. Sentimos que algo no anda bien o no es suficiente y estamos siempre tratando de llenar la brecha para hacer las cosas bien, con el fin de encontrar un poco más de placer o de seguridad. Aun cuando estamos disfrutando de algo, tenemos miedo de perderlo más tarde y nos esforzamos constantemente por más y más placer. Tal como dice Aryadeva:
El nivel más alto de personas tiene el sufrimiento mental.
Para la gente común, el sufrimiento viene del cuerpo.
Día a día , estos dos tipos de sufrimiento
abruman a la gente del mundo.
Sin embargo, brevemente, podemos decir que el sufrimiento es como una enfermedad y nosotros somos los pacientes. Por ejemplo, si un paciente diabético que toma píldoras todos los días, dejara de tomarlas solo por un día, comenzaría a tener problemas de salud. Similarmente, dependemos de tomar alimentos y varias otras cosas en nuestras vidas que si no las tenemos, aunque sea por un corto tiempo, nos veremos afectados, y esto es un factor de sufrimiento al que todos tenemos que someternos en nuestras vidas diarias.
2) La verdad del origen del sufrimiento
Todo sufrimiento tiene su causa. Buda señaló que "trishna", es decir, el ansia, el deseo, o el apego, son la fuente del sufrimiento. Una vez que la semilla del ansia o el deseo es sembrada, crece la codicia y se multiplica el apego. Como resultado de esto, una persona llega a ser esclava de sus propios deseos. Uno nunca está satisfecho, como si bebiéramos agua salada, que nunca nos quitará la sed. Hay un proverbio popular que dice: "en el mundo tenemos todo tipo de cosas para satisfacer nuestras necesidades, pero nada para satisfacer nuestra codicia".
Buda descubrió que la causa raíz del apego es la momentánea reacción mental de gusto y disgusto. Él dice que esta forma de aflicción aparece por el apego al Yo, al ego, al sí mismo. Cada uno de nosotros siempre piensa del Yo como lo más importante y se comporta como un imán rodeado por trozos de hierro. Tratamos de organizar todo el mundo de acuerdo a nuestros propios gustos, tratando de atraer lo agradable y repeler las cosas desagradables. Consecuentemente, el conflicto ocurre. Lo que uno necesita hacer es aceptar las cosas tal como ellas son, no como uno desea que sean. Particularmente, en este momento uno tiene que aceptar las cosas tal como son. Esta es la única manera de ajustarse a la situación. Sin embargo, esto es muy difícil de practicar por el auto-enamoramiento, que lleva a la convicción de que nuestros propios puntos de vista y tradiciones son los mejores y nos provoca infelicidad cuando éstos son criticados. Aparte de que el apego al cuerpo físico de uno se debe a que creemos que es permanente y puro, lo cual es una de las mayores causas de sufrimiento. Estamos tan acostumbrados a la idea de que nuestro cuerpo es inmaculado y precioso, cuando en realidad es solo una colección de treinta y seis tipos de suciedad y es tan solo una maquinaria de suciedad. Por ejemplo, el alimento que comemos, tan pronto como ha sido ingerido dentro de nuestro cuerpo es convertido rápidamente en residuo.
Otra razón: todo en este mundo tiene por naturaleza el causar sufrimiento. Si hubiera sido al revés, cuanto más nos aferramos a ellos, mayor felicidad nos darían, pero todos sabemos que no es así. Por ejemplo, la comida, el montar a caballo, el volar, o cualquier otra cosa que te guste hacer o tener, si somos excesivamente indulgentes con nosotros, cuando nos entregamos demasiado a ello, es naturalmente agotador y desagradable. Si ellos fueran la causa de la felicidad, no importando lo mucho que dependen de ella, la felicidad debería haber aumentado. Todo es impermanente, porque todo se está deteriorando a cada momento. Por ejemplo, jamás podemos bañarnos dos veces en el mismo río. Similarmente, todos los fenómenos son igual a esto y todos ellos están constantemente deteriorándose.
Sin embargo, algunas personas podrían pensar: "Yo no tengo sufrimientos", pero esto puede ser solo por un tiempo, porque no podemos saber nada del futuro. Como los budistas afirman, al renacer, aunque ahora uno no tiene ningún sufrimiento, esto no puede ser así todo el tiempo. Nunca se sabe lo que nos va a pasar mañana o en el próximo momento inmediato.
Por consiguiente, después de darse cuenta que el samsara es como un océano de sufrimiento que es causado por nuestras propias acciones, uno busca el camino que pueda guiarnos a la cesación.
3) La verdad del Sendero
Estos nobles ocho caminos pueden ser categorizados en Tres Adiestramientos: Correcta Visión y Correcto Pensamiento pertenecen al Adiestramiento en Sabiduría; Correcta Palabra, Esfuerzo, Medios de Vida y Acción son incluidos en el Adiestramiento de Disciplina Moral; y Correcta Atención y Concentración pertenecen al Adiestramiento en Concentración.
Siguiendo este Sendero y siendo adiestrados en los Tres Adiestramientos de la Doctrina Budista, los Shravakas primeramente practican Samatha (meditación de calma mental continua) y Vipasyana (Visión Interior).
En la práctica de Samatha, uno se concentra principalmente sobre la inhalación y exhalación de la respiración. Esta práctica ayuda a detener la mente errante y el desarrollo de pensamientos conceptuales. Uno también medita sobre el cuerpo como un esqueleto y su fealdad, como un antídoto para el apego hacia nuestro cuerpo, tal como se aconseja en el Abhidharmakosa.
En la meditación Vipasyana, uno medita sobre los cuatro niveles de atención, es decir, atención del cuerpo, a las sensaciones, a la mente y a los fenómenos, analizando al Yo y sus características colectivas. Meditar sobre el cuerpo como impuro, es la más cercana contemplación de éste; contemplar los sentimientos de sufrimiento es la finalidad de la contemplación de los sentimientos; contemplar sobre la Impermanencia es la finalidad de la contemplación sobre la mente y contemplar que los fenómenos realmente no tienen existencia inherente es la finalidad de la contemplación sobre los fenómenos.
El resultado final de estas prácticas es el sentimiento de repulsión hacia este samsara que está lleno de sufrimiento, sin esencia,y de darse cuenta de que la causa raíz que nos ata al samsara es el estar apegado a este cuerpo y a los fenómenos mundanos. Vasubandhu dice en el Abhidharmakosa que las causas para renacer son las aflicciones. Se dice que el sentimiento es muy fuerte al momento de la muerte, uno no desea morir o ser separado de su cuerpo, porque uno está demasiado apegado a él. Sin embargo, uno tiene que morir, no somos inmortales. Este fuerte apego hacia nuestro cuerpo al momento de la muerte, nos causa el renacer en el samsara una y otra vez. Entonces, el completo abandono de los deseos hacia el cuerpo y los fenómenos mundanos, es esencial para terminar el ciclo de nacimiento en el samsara, lo que llevará eventualmente, al estado de cesación del sufrimiento o Nirvana, el estado final de los Shravakas.
4 - La verdad de la Cesación
El Nirvana es de dos tipos, Nivana con residuo y sin residuo. Residuo aquí se refiere al cuerpo físico. En ambos estados, todas las aflicciones son abandonadas, aunque el primero está aún relacionado con el cuerpo contaminado, para más tarde cortar todo vínculo. Por ejemplo, el Buda después e haber alcanzado la Iluminación, antes de su Paranirvana, estaba en el primero, y el Buda, después de su Paranirvana (desaparición física), estaba en el segundo tipo de Nirvana. La verdad de la cesación es el estado donde la mente cesa de funcionar y no tiene ninguna relación con cualquier otra conciencia a partir de entonces, como una lámpara apagada. Este es el punto de vista, el yoga o el sendero y el resultado de los Shravakas.
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